tag:blogger.com,1999:blog-72044033749069671462024-03-12T20:12:17.539-06:00La mitocondria ancestralLos procariontes que habitaban la Tierra la contaminaron de oxígeno hace 2400 millones de años. Y morían masivamente. Algunos se refugiaron, como mitocondrias, en los pocos procariontes que eran resistentes a la nueva atmósfera oxigenada. Esclavos y amos, en nuestras células.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.comBlogger105125tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-73868675087411129802020-07-02T14:02:00.000-05:002020-07-02T14:02:00.193-05:00El juego evolutivo del amorEn la prehistoria, los humanos machos querían tener todas las relaciones sexuales posibles porque no cargaban con los hijos. Lujuria. En cambio, las hembras buscaban, más allá del sexo, una pareja para compartir la carga de criar a los vástagos y protección ante la agresividad de otros machos. Amor y seguridad. Objetivos y estrategias opuestos del juego que ambos jugaban. Para seducir, entonces, los primeros fingían amor y las segundas lujuria. Muchos machos luego revelaban su verdadera intención (pura lujuria) al tomar distancia y convertirse en padres ausentes. Muchas hembras luego revelaban su verdadera intención (no sólo la supuesta lujuria) al desplazar a otras mujeres y buscar convertirse en la "hembra alfa" (con violencia explícita o, por ejemplo, dejando un chupetón en el cuello del hombre u olvidando un champú en la regadera de la casa del amante). Por suerte, como muestran estos últimos ejemplos, todo eso ya es historia y la evolución cultural ha destruido esos papeles estereotípicos.<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-20818038147118284232019-12-06T15:02:00.002-06:002019-12-06T15:02:29.147-06:00<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhK7eE5TJyVnCg9hyjv6BXlysryeQsSPE7PUFsZ3VxVdivzq6R_7WLmznF6euOYQdm9BrjiW4i8t6jHU0AL55k_JsRt-RKluHOqOyRYoHAOEMn8yC6dTaiNtcKCedOuwLM0unmj38almkkk/s1600/00513a77-01a2-4467-a959-a833ac5f7ab3.jpg" imageanchor="1" ><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhK7eE5TJyVnCg9hyjv6BXlysryeQsSPE7PUFsZ3VxVdivzq6R_7WLmznF6euOYQdm9BrjiW4i8t6jHU0AL55k_JsRt-RKluHOqOyRYoHAOEMn8yC6dTaiNtcKCedOuwLM0unmj38almkkk/s320/00513a77-01a2-4467-a959-a833ac5f7ab3.jpg" width="320" height="240" data-original-width="1280" data-original-height="960" /></a><div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
<br /></div> Compro alegrías de amaranto, a un niño, en la calle. No debería. El trabajo infantil debería estar abolido. No tienen etiqueta de ingredientes, ni fecha de caducidad, ni logo, ni código de barras. Pero el niño me exigía que le comprara con tanta desesperación. Y las alegrías estaban a muy buen precio. Son bloques grandes, rectangulares, que me sacian más que el "fruit cake" navideño que compramos en el restaurante de la Condesa. Y están deliciosas con un café con leche. Y me hacen pensar que vivo en un país milenario, que de alguna manera resiste al Apocalipsis.
Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-13289663048510272002019-03-31T11:19:00.001-06:002019-05-01T08:40:20.617-05:00Canto a una hamburguesa veganaAmarilla parda /
mostaza agripicosa. /
Pepinillo en vinagre. /
Abro la boca. /
Con la lengua toco el borde de tu carne*. /
Me voy manchando de salsa de tomate. /
Himen espiritual que al romperse me libra /
siglos y mares: /
los nibelungos, /
los sajones conquistando romanos, /
o al revés. /
Wagner, las walkirias, /
Nietzsche, Engels y Marx. /
Jóvenes embarcados /
a los Estados Unidos de América. /
Los pleitos en el barco con /
celtas pelirrojos, /
hambrientos por hongos en las papas. /
Nueva York, /
las filas de Ellis Island. /
Y, por fin, en medio de Nebraska, /
este café con barra de aluminio................................................................................................................................................................................................................................................................................................
.
.
*Hamburguesa de "carne" hecha de huitlacoche y elote en Piyoli, José Martí 27, colonia Escandón. Este poema es un homenaje a la mejor hamburguesa vegana que he probado.
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Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-38806468951515422982018-09-06T10:50:00.003-05:002020-12-08T15:59:43.992-06:00Incendio del Museo Nacional de BrasilEl que ni llena sus formatos, ni filosofa /
porque perdió la ilusión de Guanabara, /
mastica con saudade un plato de farofa /
y muerde con los dientes la cuchara. /
Ayer se nos quemaron las empolvadas piezas /
de guerras, migraciones y mestizajes. /
Millones de especímenes de mil naturalezas /
y diademas sagradas de exóticos plumajes. /
Si Borges admiraba a Eça de Queiroz, /
yo me enselvo en la prosa de Machado de Assis. /
Soy un pobre lector, no un jíbaro feroz, /
pra cazar bandeirantes del que no es mi país. /
Te doy el pésame, amado Brasil. /
¡Cuántas veces quemaron el vudú /
y el berimbau de tu juego infantil, /
y nunca muere el arte que eres tú!<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeYff1KK-m2-BMbNd5lc8jCEsWfFYSgXqM1hI3DuC5xyMhjIG7lsyBp8v2YG6wscoWQtdyMNGclmO0oWxZs8SmSPUW4qq4cAY8ZxFBii_mdXLvVXcwEshSCiwygG-qMIiaIcd5lXZnkPYG/s1600/enslaved_brazil_001_custom-1822495df6554fec82cc743a7cb82300ba19ee06-s800-c85.jpg" imageanchor="1" ><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeYff1KK-m2-BMbNd5lc8jCEsWfFYSgXqM1hI3DuC5xyMhjIG7lsyBp8v2YG6wscoWQtdyMNGclmO0oWxZs8SmSPUW4qq4cAY8ZxFBii_mdXLvVXcwEshSCiwygG-qMIiaIcd5lXZnkPYG/s320/enslaved_brazil_001_custom-1822495df6554fec82cc743a7cb82300ba19ee06-s800-c85.jpg" width="260" height="320" data-original-width="800" data-original-height="984" /></a>
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Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-73695496910189574112017-04-20T11:24:00.002-05:002017-04-20T11:27:09.216-05:00Muchas mujeres jóvenes ignoran que a los hombres hay que domesticarnos... Otras lo desconocen toda la vida, no sé si con felices o tristes consecuencias. A mí no me domesticaron ni a la primera, ni a la octava ocasión. Recuerdo hace décadas cuando retozaba en la cama de Magalí, sonriente, y ella me soltó la enigmática frase: "Tendré que domesticarte". Pero no lo logró, se hartó y pronto me cambió por alguien a quien llamaba de cariño Catulo. Otras lo intentaron con masajes orientales, con distintos géneros de música e, incluso, en la oscuridad de las salas de cine. Yo podía percibir sus esfuerzos, su frustración, pero no entendía exactamente qué esperaban de mí. A la distancia, imagino qué sería hoy de mi vida si hubiera sido domesticado antes: en vez de desayunar ligero y cenar fuerte, despertaría ansiando chilaquiles con huevo como Rebeca. En lugar de adorar el café espresso, me habría acostumbrado a los grandes vasos desechables con café americano, como Mary. Viviría en un barrio tranquilo, como Nina. Más que leer novelas recargado contra la cabecera de la cama, vería por las noches series americanas en la televisión, como Teresa. Pero me domesticó quien me domesticó y luego he pasado de mano en mano, en un estado que ya no tiene nada que ver con la situación de la fauna silvestre. <div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-7728084258277921922017-02-15T21:17:00.003-06:002017-02-15T21:26:27.529-06:00¿Quién quiere ser siempre proletario?<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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Cuando Denise Dresser dice que aspira a que México sea un país de burgueses, cualquier persona culta de buena fe entiende que se refiere a alcanzar un país próspero para la mayoría. Pero algunos marxistas en las redes sociales leen eso como una contradicción, un absurdo, un uso ignorante del término "burgués". Sería muy difícil para mí buscar en estos momentos en ediciones en línea todas las maneras en que Marx usa el concepto de "burgués" (como sustantivo y adjetivo, además de "burguesía") en sus principales obras. Porque la palabra es usada con frecuencia en las miles de páginas que escribió para referirse a economistas burgueses, cristianismo en versión burguesa (el protestantismo), revolución burguesa, sociedad burguesa, moral burguesa, etc. Lo que es claro es que en la tradición marxista es posible designar a la clase dominante del siglo XIX como "burguesa", pero también a un conjunto de valores: el matrimonio, la sofisticación de las costumbres, el consumismo cosmopolita que hacían posible los imperios británico y francés. El propio Marx apreciaba la vida burguesa en este segundo sentido porque amaba el teatro, la gastronomía, los viajes. El burgués en este sentido es distinto del capitalista austero por ahorrador (puritano, dirá Weber más tarde). Escribe Carlos Marx en los <i>Manuscritos</i> de 1844: "Cuanto menos comas, bebas y leas libros; menos vayas al teatro, al baile, a la casa pública; cuanto menos pienses, ames, teorices, cantes, pintes, te ejercites, etc., cuanto más ahorres, mayor será tu capital (capital que ni las polillas ni el polvo devorarán). Cuanto menos eres, más tienes; cuanto menos expreses tu propia vida, más alienada será tu existencia" (traducción improvisada del inglés para los efectos de esta nota). Si cuando más tienes eres poca cosa, es porque la acumulación es una forma de incultura. Quienes no poseen un gran patrimonio porque lo han invertido, han bebido, viajado, bailado y aprendido a disfrutar el arte, esos en nuestras injustas sociedades son los burgueses. Los obreros son explotados, carecen de tiempo, están exhaustos, no pueden pagar un concierto, ni regalarle un perfume fino a sus esposas. Igual que Dresser, yo quisiera que México sea un país de burgueses en este sentido. Quien diga que no es un significado legítimo de la palabra debe coger una enciclopedia o leer, por ejemplo, a Alexandre Kojève. Éste, tratando de interpretar a Marx, se preguntaba si la sociedad ideal, la sociedad igualitaria, sería más parecida al "American way of life" o a la sociedad esnob japonesa... o a otra sociedad burguesa. Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-34675694468476886762016-05-25T16:15:00.002-05:002016-05-25T16:21:03.521-05:002016, año de la transición democráticaAl fin alcanzamos, en 2016, la transición a la democracia en México. Si, en Estados Unidos, las familias pueden discutir de política en la mesa, en México eso no era fácil. Allá no está mal visto preferir al candidato del partido republicano o al del demócrata, ni cambiar con respecto a la preferencia de la última elección, ni ser constante durante mucho tiempo en las preferencias. De este lado del río Bravo, en cambio, cuando era obligatorio votar por el PRI o no votar (pues el sistema era de partido único), no había democracia. Discutirlo en la mesa ni siquiera tenía sentido. Y cuando, desde 1997, algunos buscábamos ingenuamente descubrir a la opción redentora entre el PAN y el PRD, tampoco era democracia pues estábamos socialmente determinados (no votábamos con libertad). Era escandaloso que en una familia de izquierda el hijo se pronunciara por el PAN y viceversa, por el PRD, dentro de una familia acaudalada.
Pero se están invirtiendo los papeles. En Estados Unidos, los electores de Trump no pueden confesar cómodamente su preferencia (es demasiado polémico). En México, luego del poderoso movimiento anulista, todo vale.
¡Democracia al fin! La gran ventaja de que todos los partidos políticos hayan tocado fondo es que podemos votar sin culpa por cualquiera al que le descubramos alguna luz. La corrupción, mediocridad y demagogia de todos ellos nos hacen libres de elegir a alguno. Porque si ninguno es bueno, votar por cualquiera está permitido. Sí, Dostoyevski me inspiró con su eslogan: "Si Dios no existe, todo está permitido".
Siempre he perdido mucho tiempo tratando de identificar la opción política correcta y aun así siempre voto con sentimiento de culpa. El PRI, no porque fue el partido de Estado y son corruptísimos. Quadri, no porque se prestó al juego de Elba Esther. El PAN, no porque es de derecha homófoba y misógina. El PRD, no porque postula a gángsters y ladrones como Toledo y Valencia. Morena, no porque está acaudillado por un iluminado conservador e ignorante parecido a Maduro. Así argumentaban los anulistas hace un año.
Pero, en 2016, hay que añadir que Quadri sabe de ecología y de sustentabilidad, que el PRD defiende esta vez los derechos de personas con discapacidad al postular a Katia D'Artigues y que Morena, reconozcámoslo, practica una corrupción "revolucionaria", no para comprarle mansiones blancas a López Obrador. Son la misma porquería que antes, todos malos, pero alguno peor que otros. Hoy soy más libre en mi voto que nunca antes ¡La ingenuidad ha muerto, viva la (podrida) democracia! <div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-79874934756456131632015-08-18T16:40:00.001-05:002015-08-18T16:43:17.767-05:00¿Por qué no soy ecosocialista?Porque los campesinos y granjeros que son una alternativa a la agroindustria mediante producción y comercialización limpias suelen creer en la propiedad y el comercio privados y no se consideran necesariamente ecosocialistas.
Porque nadie sabe si el ecosocialismo es la defensa de la propiedad colectiva de la tierra, la reforma agraria que promueve el minifundio, la “dictadura del proletariado verde” que imponga por la fuerza soluciones a la crisis ambiental u otra cosa.
Porque la palabra “socialismo” tiene significados diferentes en latitudes diferentes, generando gran rechazo en países ex-comunistas de Europa del Este, en Europa del Norte y Estados Unidos, incluso entre granjeros y trabajadores que persiguen la igualdad, la justicia y la sostenibilidad ambiental.
Porque existe un riesgo de sectarismo al elegir una ideología antes de construir una agenda por la sostenibilidad, de modo que otros ecologistas, con otras ideologías, podrían considerarme como un adversario a vencer por la palabra “ecosocialismo”, en vez de un aliado.
Porque lo que me mueve en ecología política es una serie de problemas no exclusivos del capitalismo (contaminación industrial, sobrepoblación, desaparición de áreas naturales y especies animales).
Porque existen algunas aportaciones del capitalismo que podrían contribuir a enfrentar la crisis ambiental, como la innovación tecnológica acelerada que puede ser dirigida hacia productos orgánicos, biodegradables, sostenibles según su huella de carbono, etc.
Porque ecosocialismo hace referencia, para algunos, a la izquierda desarrollista de los presidentes Lula, los Kirchner y Correa, de Brasil, Argentina y Ecuador, quienes, aunque al principio cercanos al ecoindigenismo, luego hicieron descansar el crecimiento de sus países en la promoción de la agroindustria transgénica, en el extractivismo y en la promoción de megaproyectos hidroeléctricos.
Porque algunos no se llaman “ecosocialistas” por ser ecologistas y creer en la urgencia de solucionar la crisis ambiental sino porque creen que la ecología le dará oxígeno a sus propios partidos ortodoxos de izquierda.
Porque mientras una militante ecofeminista no me llamará “ecomachista” por el solo hecho de no asumir su propia perspectiva, los ecosocialistas arrastran el pensamiento binario (izquierda/derecha) al campo de la ecología política y llaman “ecoliberales”, “ecocapitalistas” a la mayoría de quienes no asumen sus teorías de la historia y de la política.
Porque para colaborar con un ecosocialista no necesito designar mi pensamiento con la misma palabra que él el suyo.<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-47498250908751905372015-05-17T17:24:00.000-05:002015-05-17T18:12:51.604-05:00Ni anular, ni someterse a los partidos. Por un voto paraconsistente<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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Votar racionalmente en México es muy difícil. He dedicado días a entender cuántas boletas tacharé en estas elecciones y quiénes son los candidatos (locales, federales, plurinominales, delegados, etc). Me ayudó el sitio del Instituto Electoral del Distrito Federal (http://www.yodecidodf.org.mx), pero éste no basta. Muchos candidatos no han subido allí sus datos, además de que no están los diputados federales por mayoría. En mi distrito (XIII) local, la izquierda más radical, MORENA, postula a un empresario que, según algunos, tiene negocios en su partido (véase http://goo.gl/EclKnQ). El partido "socialdemócrata", PRD, lanzó a un junior ricachón que no divulgará su situación patrimonial. Por su parte, el demócrata cristiano PAN, ha colocado en la competencia a una politóloga con estudios de posgrado en desarrollo urbano por la UAM. Suponiendo que un elector de izquierda voté según su "conciencia de clase", en el distrito XIII local debería entonces votar por el PAN, es decir, por la derecha. Tal voto, sin embargo, sería también contradictorio. Yo había pensado que la lógica paraconsistente (el estudio de los sistemas imperfectos y, según la cual, en algunas condiciones es preciso tratar las contradicciones de forma atenuada) era una extravagancia brasileña (país donde se ha estudiado mucho). Pero el intento de votar racionalmente en México me está llevando a cambiar de opinión (y, por lo demás, a perder mucho tiempo). Llamo "voto paraconsistente" al de un elector de derecha o de izquierda que opta, puntualmente, por un partido tradicionalmente considerado de izquierda o de derecha, respectivamente. Muchos expertos me dirán que este comportamiento es irracional, pues más allá del candidato, contribuye al financiamiento del partido con la ideología contraria. Aunque parcialmente cierto, también podríamos argumentar que el voto paraconsistente es racional porque contribuye a modificar las ideologías partidistas en el sentido deseado por el elector (ya que el votante paraconsistente es atraído por un candidato de algún modo afin, no por cualquiera, y que, por lo tanto, se encuentra "a la izquierda de la derecha" o "a la derecha de la izquierda"). Dicho de otro modo, los votantes paraconsistentes estamos entre el centro y nuestros partidos favoritos, y a veces concedemos un voto a candidatos suficientemente centristas de otro partido. Finalmente, el voto paraconsistente puede ser más racional que el "voto duro" cuando detrás de un partido se oculta, por interés, un candidato con una ideología distinta a la pregonada por el instituto político (como el perredista ricachón y poco transparente de mi distrito, a quien sólo agradezco por haberme inspirado este <i>post</i>). Desde luego, el voto paraconsistente debe ser un acto puntual (votar sistemáticamente por candidatos de la izquierda, siendo de derecha, sería un simple cambio de ideología). El voto paraconsistente es racional incluso acompañado de una aplicación también puntual del voto nulo. Por ejemplo, más allá del distrito XIII local, los diputados plurinominales de la izquierda me causan dudas. Un paréntesis para explicar por qué: (los de MORENA serán ciudadanos con poca idea del funcionamiento del Congreso, pero fieles al líder, pues fueron insaculados entre representantes de cierto nivel; sus decisiones dependerán de las indicaciones de López Obrador al principio, como única manera de orientarse en un trabajo altamente técnico, pero luego serán tan susceptibles de ser comprados como cualquiera, como nos recuerda el caso de "Juanito". Por su parte, los diputados plurinominales del PRD provienen de una maraña de corrientes fieles a Mancera, Bejarano y "Los Chuchos". En este segundo caso, googlear a los candidatos de la lista del PRD es deprimente; hay en él incondicionales como en MORENA pero, además, hay corruptos con una exitosa carrera política. Pero, al mismo tiempo, me parece interesante el experimento de participación ciudadana y de insaculación de MORENA y, por el otro lado, creo que las reformas fiscal y de telecomunicaciones de "Los Chuchos" fueron positivas). Es probable que me decida pronto entre una de esas dos listas (en este caso, descarto a todos los demás partidos), pero suponiendo que mi indecisión no se resuelva y me lleve a anular mi voto en el caso de las diputaciones por representación proporcional; en ese caso, darle tres votos a la izquierda, uno a la derecha y una anulación, sería votar paraconsistentemente. Hacerlo, sostengo, sería racional dada nuestro imperfecta democracia. Más racional que anular todos los votos, pues los poderes públicos no se detienen a esperar que el anulista se sienta satisfecho con la oferta electoral (y cualquier razón para preferir a uno sobre otro debe ser transmitida al sistema para identificar a los mejores representantes populares). Dice José Antonio Crespo que ante una fruta con 20 gusanos y una con 18 gusanos, no vale la pena comprar… excepto cuando no podemos aguantarnos el hambre (en cuyo caso, vale la pena tomar en cuenta también el tamaño de la fruta, el sabor, el precio, etcétera).Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-23636990680677140912015-05-14T14:13:00.002-05:002015-05-14T14:17:56.151-05:00De un académico politizado a otroTwitter y sus telegramas de 140 caracteres ya no dan para los intercambios de ideas con mi colega Juan Jacobo Schmitter. Por eso, extiendo nuestra discusión a mi blog. En este caso, comento muy brevemente su nota "El voto (in)útil" publicada en https://morenaopb.wordpress.com.
JJS dice que <i>"muchos de los votantes de Fox también tuvieron que reconocer que [llegar a la presidencia] no sirvió para nada"<b></b></i>.
Comentario: No voté por Fox y, sin embargo, creo que la alternancia en el poder sirvió para introducir en México, por primera vez en la historia, la política de partidos múltiples en la cual los ciudadanos nos vemos forzados a escoger. Para hacerlo, algunos nos ponemos a intercambiar argumentos. Si a eso no se le quiere llamar democracia, no importa, no existía antes en México, cuando debíamos acatar el "dedazo" presidencial por el cual "Dios nacía y moría cada seis años".
JJS dice que <i>"Si no hubiera más opciones que PRI, PAN o PRD, podría entenderse votar por PRD, un “voto útil” para el “menos malo” de los tres. Pero votar así entrañaría un riesgo atroz, habida cuenta de que, para volver a la prueba mencionada, también el PRD firmó ese Pacto contra México. En vista de esto, aunque el PRD pudiese estar “más a la izquierda” que el PRI, no cumple requisitos mínimos de honestidad y congruencia como partido. No es útil votar por ellos en sentido alguno: es votar por el mismo régimen".<b></b></i>
Comentario: Que el PRD haya firmado el pacto por México y que sea controlado por una camarilla burocrática llamada "Los Chuchos" son las dos razones quizá más mencionadas por los líderes y militantes de Morena contra tal partido. En lo personal, doy peso a ambos argumentos, pero los sopeso frente a los argumentos, también legítimos, contra Morena. El resultado será que tengo frente a mí a la izquierda pragmática-burocrática luchando electoralmente contra la izquierda cesarista-radical (traté de eludir los adjetivos "acaudillada" y "sectaria" para no ser acusado, por mi colega u otro militante de Morena, de insultarlos. Los adjetivos que elegí pueden quizá gustarles, pues César era un líder y Marx recordaba que "ser radical es tomar las cosas por la raíz").
Yo no me pregunto si debo ser pragmático o radical para luego decidir mi voto. Al revés. Voto según mi leal saber y entender y, luego, sé que fui pragmático o radical (o idiota). En mayo de 2015, me atraen candidatos de izquierda preparados, pero también ciudadanos insaculados que podrían romper con la sordera corrupta de la clase política. Me atraen los proyectos ambiciosos de igualdad social (como el emprendido por AMLO en el DF en favor de los adultos mayores que hoy es ejemplo en todo el país), pero temo a una izquierda autoritaria y formada durante décadas en tradiciones maoístas, estalinistas, peronistas, etc. Cuando los Chuchos del PRD muestran su cinismo mezclado con tibieza, me digo que votaré por Morena. Cuando los militantes de Morena me insultan en Twitter por pragmático, digo que no los premiaré con mi modesto voto. Pero no soy anulista, por lo cual, mi voto se ira seguramente a la izquierda pragmática-burocrática o a la cesarista-radical, o a ambas.
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Entre las voces más viscerales que he escuchado en mi entorno contra Carmen Aristegui, me duelen las de dos personas que fueron entrevistadas por ella en momentos clave. Les dio el micrófono cuando se lo pidieron, si bien, como buena periodista, también les hizo alguna pregunta incómoda. Ahora, Carmen ha sido despedida y ellos dicen:
<b>(1) "No fue un ataque contra la libertad de expresión, pues ella tiene un programa en CNN y un portal de noticias propio, además de que pudo exponer sus razones el último día en MVS y en la conferencia de prensa."</b>
Este argumento olvida que la libertad de expresión se concreta en espacios específicos. Carmen ya no está en las mañanas, de 6:45 a 10:00 am, y no es compensación proporcional el que pueda dirigirse a televidentes de paga y a tuiteros. Si bien expuso su posición frente al despido de su equipo, por el momento la hemos perdido, justo en un año electoral en el que necesitábamos de su olfato de sabueso contra abusos y corrupción. El despido de Carmen sí fue un ataque contra la libertad de expresión, como lo muestran los lazos estrechos entre MVS y el gobierno federal (la mancuerna de los hermanos Chao, el abogado de la empresa transformado en comunicador de Peña, etc.), además de las incoherencias de los Vargas (que atribuyen el despido a un ultimátum de ella del viernes 13, curiosamente anterior a una propuesta de solución mediante lineamientos editoriales, de censura previa, por parte de ellos).
<b>(2) "Carmen se victimiza, es ególatra, mesiánica y, seguramente, autoritaria frente a su equipo."</b>
En el mundo de las telecomunicaciones, como en el de la política, los rostros y las voces importan en sí mismos. Si Carmen concentra mucha atención en su propia persona, digamos en la "marca Aristegui", eso debe ser juzgado en primer lugar por su eficacia frente al objetivo: construir un canal de información e investigación periodística. Yo no busco un noticiero en el cual no existan protagonismos, sino uno en el cual se luche por la transparencia y la democracia. En el momento en que se organiza un golpe contra el equipo Aristegui, debemos solidarizarnos con él en vez de montar juicios contra la personalidad de Aristegui. En particular, se deberían solidarizar quienes se han beneficiado de su micrófono; la deslealtad disfrazada de espíritu crítico no es una virtud.
<b>(3) "Carmen mezcla la ambición capitalista con el deseo de encabezar el movimiento democrático. Debería decidirse por una u otro".</b>
La comunicación es una disciplina en sí misma. ¿Cómo logró Carmen Aristegui la mayor audiencia y los mejores reportajes de investigación? Con oficio. Lo hizo al elegir una plataforma comercial, un equipo profesional, un tono crítico y muchos otros ingredientes. Que izquierdistas e intelectuales pretendan enseñarle cómo debe hacer las cosas (desde medios alternativos y comunitarios, radios universitarias, cooperativas, etc.) es legítimo, pero muy probablemente ingenuo. Al equipo de Aristegui debemos reconocerle lo que nos daba, en vez de pretender enseñarle cómo hacer su trabajo.
Finalmente, esta rápida carta esta dirigida a quienes, siendo por lo demás gente decente, son desleales con Aristegui. Me ha dolido mucho ver el odio -por suerte, aislado- hacia una mujer que yo admiro tanto. Porque, a diferencia de esas personas que alguna vez estuvieron en la cabina de Aristegui, ella y yo (parafraseando a Cortázar) no nos hemos visto nunca.
Yo tengo una hermana/
no nos vimos nunca/
pero no importaba./
Yo tengo una hermana/
que iba a la cabina/
mientras yo dormía./
La quiero a mi modo/
le tomé su voz/
libre como el agua./
Camine de a ratos/
cerca de su sombra/
no nos vimos nunca/
pero no importaba./
Mi hermana despierta/
mientras yo dormía./
Mi hermana mostrándome/
cuando despertaba/
su estrella elegida.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-4433353229157766622014-12-10T08:51:00.001-06:002014-12-10T15:50:54.459-06:00Esnobismo, mentiras y revolución<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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"¿La UAM Cuajimalpa? Esa no es UAM… cuando se votan paros estudiantiles, los profesores dan clases extramuros en la Ibero". Así mentía recientemente en una fiesta una vedette de izquierda, activista, defensora de derechos humanos, heroína de su extendido círculo face-social. La trató de refutar una alumna de Cuajimalpa que estaba presente, pero ganó el peso del personaje. En la izquierda vale más lo que diga alguien comprometido y famosón. Es más audible quien escribe en <i>La Jornada</i> o forma parte de una ONG, aunque sea un mentiroso. ¿Entienden mi furia? No creo. "Se enoja porque es profesor en Cuajimalpa, pero no es tan grave" o "Algo habrá de verdad, son menos comprometidos allá en su sede en Santa Fe que en Xochimilco". En realidad, el problema no es una ofensa personal, ni a un grupo, es más grave. Se trata de una práctica generalizada en la izquierda mexicana (desde luego, no exclusiva de ésta). La verdad no importa. Importa la "verdad" resplandeciente de lucha, la "verdad" del color de la tierra, la "verdad" como el maíz. Pero siempre "verdad" entrecomillada. Ahora mismo, estamos quizá construyendo ese tipo de "verdades" entrecomilladas. Ya se dice que se ha visto a los normalistas desaparecidos cruzar la sierra o que los llevan Guerreros Unidos y atraviesan un río, atados. Y quisiera que fuera verdad, pero sospecho que algunos quieren construir un mito, una leyenda sanadora e inspiradora por siempre de revoluciones… Yo prefiero saber la verdad, sin comillas, por dura que sea.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-44761048876484940462014-12-08T11:57:00.002-06:002014-12-08T21:56:43.717-06:00Para leer a Edgardo Buscaglia<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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Ante la distancia entre sus palabras y sus gestos, me veo obligado a escribir estas líneas. “¿Quién es Edgardo Buscaglia?” me pregunta Sofía que no sabe si abrir los oídos al académico y agitador que algunos temen sea un charlatán disfrazado de consultor internacional sabelotodo. “No lo sé bien, yo también me lo pregunto”, le respondo a mi amiga. Buscaglia es arrogante como lo son, decimos en México, los argentinos de su generación (¿cómo se suicida un argentino?, saltando desde su ego, etc). Siempre está llegando de un vuelo internacional o a punto de perderlo. Sin duda es brillante; cita por nombre, sin mirar sus notas, al gabinete de Peña Nieto, los años en que ocurrieron masacres y capturas de capos en México, los textos académicos clave que nos explican el lavado de dinero o el surgimiento del Cártel del Golfo. Siempre insiste en que México está lleno de falsos expertos (sólo hay 3 verdaderos especialistas del crimen organizado en el país, afirma) y desprecia a algunos de sus ex-colegas en el ITAM. Su discurso se parece mucho, en lo enfático, al de la izquierda obradorista, hoy Morena, y entre sus aliados intelectuales está el combativo académico John Ackerman.
Buscaglia nos impele a salir a las calles, ya no a solidarizarnos con víctimas de la “narcoguerra” o el “narcoestado”, sino a actuar. ¡Cercar el Congreso, paralizar la economía! Y lo mínimo que podemos hacer es preguntarnos quién es ese señor, antes de arriesgar nuestro empleo, nuestra libertad, nuestra vida haciéndole caso.
Pero cuando uno escucha atentamente al “investigador de la Universidad de Columbia” (entrecomillo porque, siendo yo un modesto profesor, una y otra vez me pregunto cómo puede Buscaglia estar tanto tiempo en México y en muchos otros países y trabajar además en una famosa universidad americana)... cuando uno escucha atentamente a Buscaglia, estaba yo diciendo, a pesar de su vehemencia sus propuestas no corresponden a las de Obrador, ni a las de Morena, ni a las de Ackerman. Él nombra con todas sus letras la probable corrupción en el asunto de la “casa blanca” de Peña-Rivero, pero no nos recomienda exigir la renuncia del presidente. Él llama a la movilización pero, a diferencia de Ackerman, no concentra esfuerzos en defender la inocencia de cualquier detenido en las manifestaciones y, en cambio, sí admite la posibilidad de que haya “idiotas útiles” que lancen cocteles molotov por iniciativa propia, contribuyendo a desencadenar la represión de la policía.
Una breve revisión en Internet muestra que Buscaglia no fue siempre antigobiernista en México. A la muerte de José Luis Santiago Vasconcelos, el ex-zar antidrogas mexicano que falleció en un accidente aéreo junto al Secretario de Gobernación Juan Camilo Mourinho, Buscaglia no se ahorró elogios para aquel (elogios, en última instancia, a la política antidrogas anterior a Calderón).
En resumen, a pesar de su tono hipercrítico, Buscaglia es un aliado de los que en las redes sociales son a veces llamados “tibios”, porque no exigen la renuncia de Peña Nieto y, aunque hacen lo posible para que continúen las manifestaciones, condenan a los encapuchados y los actos de violencia. Buscaglia reconoce la necesidad del compromiso y quizá del sacrificio ciudadanos, pero no de la violencia como sí lo hace una parte de la izquierda mexicana que afirma en los cafés que “para preparar un <i>omelette </i>hace falta romper huevos”. Como otros observadores extranjeros, Buscaglia deplora que entre la inercia de una sociedad clientelista que exige soluciones al Estado y la inercia violenta que reivindica a la guerrilla de Guerrero, no haya existido en México una posición intermedia fuerte: un movimiento ciudadano determinado a cambiar las cosas por la vía pacífica.
Así, esta breve nota tiene como objetivo tratar de identificar con claridad una de las posiciones teóricas que están presentes en el actual movimiento de la sociedad civil mexicana. Ésta no coincide con el discurso tradicional de la izquierda obradorista, aunque no tiene por qué confrontarse con ella. En una frase, le responderé a Sofía: “Opino que sí vale la pena oír a Buscaglia y, mejor aún, comprar su último libro, leerlo y discutirlo juntos. No se trata de un charlatán. Sus propuestas, además, son más conciliadoras de lo que sugiere el tono con el que las lanza. Según él, el movimiento ciudadano del <i>Otoño Mexicano</i> debe imponerle su propia agenda al Estado y hay que preparar esa agenda”.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-49859097986600267552014-11-21T12:06:00.001-06:002014-12-01T08:54:11.433-06:00La cuestión de los encapuchados<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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¿Debemos repudiar o incluso denunciar a quienes marchan encapuchados? Es complicado, incluso para quienes creemos que debemos marchar con el rostro descubierto. Ayer, 20 de noviembre del 2014, comencé marchando a las 5:30 dentro del elegantísimo contingente que vestía de negro en el Ángel de la Independencia. Ahí vi a vecinos, colegas profesores y famosos tuiteros. Entre ellos, los pocos encapuchados eran cortés pero enfáticamente señalados por decenas de clasemedieros: "¡Capuchas no, hermano!", "¡Fuera capuchas!". ¿Y quiénes eran los encapuchados? En lo que me tocó ver, había por ejemplo contingentes de maestros de municipios de Guerrero en los cuales algunos se cubrían la cara con paliacates perforados en ojos y boca o con pasamontañas estilo zapatista. También había adolescentes grafiteros en los márgenes del cortejo que antes de pintar un quiosco o un parabús se cubrían. Algunos amigos me cuentan que tuvieron éxito al pedirle a los compañeros que se quitaran la capucha, pero lo que yo presencié es que la exigencia de descubrirse que lanzamos a maestros y grafiteros no fue efectiva. Pronto pensé "tal vez tienen un narcoalcalde en su municipio y temen ser fotografiados aquí, no debo juzgarlos". Luego avancé a grandes pasos hacia la vanguardia de la marcha, pero no llegué a ver a los padres de los normalistas, de tan gigantesca que era la concentración. Tomé entonces en contrasentido hacia Eje Central entre estudiantes de universidades públicas. Ahí había bastantes encapuchados. "Son pandillas, tenga cuidado" me dijo un joven desconocido. Regresé entonces hacia una zona confortable y ¡milagro! me encontré con el contingente de mis alumnos. Obviamente reconocí a quienes tenían la cara descubierta, pero fue curioso ver que algunos de ellos usaban paliacates para taparse la boca y la nariz. No sé por qué. No podía regañarlos, no era mi papel o creí que no era, aunque hubiera querido decirles que las protestas exitosas suponen dar la cara, de modo que los provocadores e infiltrados no puedan actuar. Los estudiantes del contingente de la UAM y otros aledaños también hostigaban a gente (como yo antes), pero no a encapuchados sino a supuestos infiltrados. Cuando veían a alguien con el pelo corto, tipo militar, cientos de dedos lo rodeaban al grito de: "¡Fuera infiltrados!".
Luego llegué al Zócalo pero me salvé a tiempo de los desmanes ¿iniciados por encapuchados? No solamente, al parecer muchos de los que empezaron la gresca tenían el rostro descubierto. Por eso agredían a los periodistas que los fotografiaban.
Algunas conclusiones personales: Ya no condeno tajantemente a todo "encapuchado" ¡Sería imposible hacerlo cuando descubrí a algunos estudiantes empaliacatados! Pero trataré de debatir respetuosamente con ellos, fuera de la posición de maestro-alumno (son libres, son adultos y no puedo evitar que elijan cubrirse, pero yo también soy libre, soy adulto y puedo elegir tratar de convencerlos de que no lo hagan). Es obvio que la movilización masiva de nuestra sociedad que busca mejorar la situación del país sólo continuará si la represión por parte de la policía no se generaliza. En cambio, si los desmanes aumentan en las manifestaciones, éstas se diluirán. Por eso, no caeré en relativizarlo todo: aunque no condeno tajantemente los paliacates y pasamontañas, junto a muchos otros pido que evitemos que sirvan para romper la acción colectiva. Comprendo que exista el derecho a la rebelión, pero me parece que quienes tengan el valor de rebelarse no deben escudarse en otros ciudadanos. No me sorprende que se peleen policías y activistas radicales, pues esos rituales existen en muchas partes del mundo, pero lamento que eso pueda acabar con el actual tsunami ciudadano y con las esperanzas que porta.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-62597269481718754182014-08-12T15:30:00.000-05:002014-08-22T19:15:52.835-05:00Los bombardeos de Estados Unidos al "Estado Islámico"<i></i>Desde América Latina, el hecho de que el ejército estadounidense lance bombas en algún lugar del mundo sólo puede interpretarse como un episodio de intervención imperialista. La inferencia es automática: “bombas gringas <i>ergo</i> imperialismo”. Y existen muchas razones históricas para ello. Desgraciadamente, eso provoca una especie de pereza intelectual, incluso ¡pleonasmo! pereza <i>intelectual</i> entre los <i>intelectuales</i> latinoamericanos. A diferencia de analistas estadounidenses, franceses o españoles, a pocos columnistas latinoamericanos les preocupa detenerse en los complejos detalles de los conflictos en Medio Oriente. Por ejemplo en los dos siguientes: el hecho de que el ejército del llamado <i>Estado Islámico </i>(<i>EI</i>) en Irak sea dirigido por un antiguo líder de Al Qaeda (y que hoy sea rival de ésta) y, en segundo lugar, el dato de que los yazidíes, por cuya protección se anuncia el bombardeo estadounidense a las posiciones del <i>EI</i>, tengan una religión que asume el perdón divino a Tawusî Melek, el ángel que desafió a Dios, y que los islamistas identifican con Shaytan (Satán). Esos dos detalles, sin embargo, hablan de un conflicto muy distinto del que imaginamos los latinoamericanos con nuestras categorías poscoloniales. ¿Por qué? Porque, por extraño que parezca, la información disponible muestra que lejos de disputarse el petróleo del Kurdistán, un puerto estratégico o un territorio sagrado, los islamistas pretenden exterminar a un pueblo que consideran diabólico. Baste observar que los jihaidistas del <i>EI</i> no han cometido, hasta donde se sabe al momento de escribir estas líneas, asesinatos en masa de cristianos ¡A pesar de ser éstos los herederos de los odiados invasores de las Cruzadas y correligionarios del Occidente capitalista que es mayoritariamente “nazareno”, para usar la traducción literal del árabe! Pero, en cambio, los seguidores del doctor en teología islámica Abu Bakr al Baghdadi, líder del <i>EI</i>, sí han sacrificado ya a cientos de yazidíes, esos “infieles” adoradores supuestamente de Shaytan que, en realidad, son una humilde comunidad montañesa. La racionalidad o, mejor dicho, irracionalidad detrás de esa conducta militar guiada por el fanatismo religioso nos habla de la naturaleza de ese conflicto en particular. Desde luego, existen analistas, como Robert Fisk, que ven detrás de esta nueva guerra la vieja codicia petrolera, pero ¿por qué los jihaidistas se detienen entonces a provocar una carnicería de "infieles" que sólo los debilita ante la opinión pública mundial y retrasa su avance? Y si el bombardeo de Estados Unidos a la artillería de los jihadistas islámicos del <i>EI</i> busca detener el genocidio de los yazidíes, condenar la intervención de Obama (al menos en su primera fase) desde la visión latinoamericana tradicional que la llamaría “expansionista e interesada” es caricaturesco. No digo que quienes rechacen la intervención militar de potencias occidentales merezcan desprecio: el gobierno alemán, por ejemplo, considera, y es su legítimo derecho hacerlo, que involucrarse en esa guerra terminaría favoreciendo a los islamistas, cuando las armas occidentales caigan en sus manos y se genere un movimiento de solidaridad entre sunitas radicales del mundo. Pero el gobierno alemán no actúa con la pereza latinoamericana que, a partir de nuestro doloroso pasado de intervenciones militares y golpes de Estado coorganizados por la CIA, interpreta cualquier acción militar estadounidense como un acto de conquista capitalista. Y se nos olvida que, luego de que Estados Unidos destapara la "caja de Pandora" al invadir Irak, el hecho de no impedir un genocidio allí sería visto como su responsabilidad.
He leído vagas condenas a los "nuevos bombardeos de Estados Unidos a Irak" por parte de columnistas latinoamericanos de izquierda y de derecha. Y un ejemplo de dicha pereza intelectual en forma de inexactitud informativa es el titular del periódico mexicano <i>Excelsior</i> del 11 de agosto: “Clinton rompe con política de Obama; critica ataques a Irak”. En realidad, Hillary Clinton no criticó los bombardeos a los islamistas, sino el hecho de que un decidido apoyo militar no hubiese llegado mucho antes (al comienzo de la guerra civil en Siria). Pero la frase “[Clinton] critica ataques a Irak” reconforta en su antintervencionismo a miles de latinoamericanos que no se tomaron la molestia de conocer las verdaderas declaraciones de la precandidata a la presidencia de Estados Unidos. “¡Incluso Hillary critica a Obama!” piensan, sin saber que tal crítica parte de motivos contrarios a los que aducen los pacifistas.
¿Debemos entonces ver los bombardeos estadounidenses al <i>EI</i> positivamente? Al menos, creo que debemos comprender a los kurdos, europeos, israelíes, árabes chiítas y estadounidenses que ven dichos ataques militares como una legítima reacción con fines humanitarios (más aún, como una reacción urgente y necesaria). Después, pero sólo después, podemos estar a favor o en contra de la medida del gobierno de Obama. Por otro lado, opino que también debemos tomar distancia de quienes realizan el razonamiento categórico en sentido inverso: “Los islamistas sunitas rebeldes son un grupo terrorista aún más radical que Al Qaeda, por lo tanto, deben ser exterminados”. La premisa mayor parece cierta: se trata de un grupo que está cometiendo atentados y masacres imperdonables en nombre de la guerra santa y proclamando un único califato musulmán como ni siquiera Bin Laden se había atrevido a hacer. Pero la conclusión es peligrosa. Si ningún pueblo merece ser exterminado, es dudoso que algún grupo humano sí. No sabemos si la crueldad del <i>EI</i> alcanza para identificarlo con el “mal absoluto”, como <i>a posteriori</i> hacemos con el nazismo. Franco Cardini, en su libro <i>Europa y el Islam. Historia de un malentendido</i>, nos recuerda que, durante muchos siglos, el Islam encarnó la sapiencia y fue la religión racionalista por excelencia. Frente a judíos esotéricos y cristianos contradictorios que predicaban la naturaleza humana y divina de Jesús, los musulmanes eran los máximos representantes de la filosofía. Ojalá existiera algún modo de fomentar que los musulmanes sunitas honraran ese pasado. Pero, mientras se encuentra ese modo, no es posible condenar las acciones militares de contención que busquen prevenir el genocidio de un pueblo inocente.<div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-2726605211200489952013-12-19T14:22:00.000-06:002013-12-19T14:22:18.514-06:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKqqMBKDgY4yQ9gr9zMclnbwe6oWtyYRC4lLwPwte20ravY4QAlqrKC06-q5u2EeL4NcR9Kv9zADZSwIGpJclSI-ULpHG9ys92wjyY65vI5zs-pf7fc091krqDceCUPAjM0zVB9dxImpS_/s1600/Captura+de+pantalla+2013-12-19+a+la(s)+14.16.44.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjKqqMBKDgY4yQ9gr9zMclnbwe6oWtyYRC4lLwPwte20ravY4QAlqrKC06-q5u2EeL4NcR9Kv9zADZSwIGpJclSI-ULpHG9ys92wjyY65vI5zs-pf7fc091krqDceCUPAjM0zVB9dxImpS_/s320/Captura+de+pantalla+2013-12-19+a+la(s)+14.16.44.png" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2BWwVbXJuGW3YKRHCoVL5cpjjBynSX3vlrpAEWzpHdl4v5_z9Mkz6Fdx4HNQeDrQ6fPzi6O8L2dArvioLqUYe686N-tIVG3CjvrMp0b2vsk6A-OtMxtyUjJ2TuTj5E2pQIxz-SbFxy0kb/s1600/Captura+de+pantalla+2013-12-19+a+la(s)+14.17.26.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh2BWwVbXJuGW3YKRHCoVL5cpjjBynSX3vlrpAEWzpHdl4v5_z9Mkz6Fdx4HNQeDrQ6fPzi6O8L2dArvioLqUYe686N-tIVG3CjvrMp0b2vsk6A-OtMxtyUjJ2TuTj5E2pQIxz-SbFxy0kb/s370/Captura+de+pantalla+2013-12-19+a+la(s)+14.17.26.png" /></a></div><div dir="ltr" style="text-align: left;" trbidi="on">
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Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-17721126251121842372013-12-18T12:46:00.003-06:002013-12-18T13:35:07.126-06:00PROTESTAR CONTRA LA REFORMA ENERGÉTICASoy partidario de la apertura moderada del sector energético a la participación privada por razones ambientales y económicas. Hoy, México pierde mucho dinero importando gasolina. La inversión privada en petroquímica básica (refinerías, principalmente) contribuiría, además, a crear empleos. Pero a unos cuantos días de aprobada, la reforma constitucional en materia energética tal como quedó me alarma mucho. La coalición del PRI y el PAN produjo un régimen completamente abierto a nivel constitucional y obsesivamente detallado en los artículos transitorios. El resultado es, por ejemplo, una repartición de ingresos futuros del nuevo Fondo Soberano del petróleo con un orden de prioridades decidido por esos partidos por fuera de las vías ordinarias (principalmente el Presupuesto de Egresos de la Federación de cada año). En una palabra, pretenden eludir la atribución de los representantes populares de decidir el reparto democráticamente. Además, aquellos partidos no respondieron nunca a los argumentos de ambientalistas contra el procedimiento de extracción de gas de lutitas o gas <i>shale</i>, conocido como <i>fracking</i> (tecnología prohibida en otros países). Esa nueva industria contaminará los mantos friáticos del noreste del país y encarecerá el agua, sin que se avizoren controles (vista la frivolidad con la que fue aprobado el paquete de modificaciones legales). Sumémosle a todo ello que la vaguedad del régimen contractual que diseñaron PRI y PAN es una puerta abierta a la corrupción trasnacionalizada. Funcionarios públicos repartirán licencias o contratos multimillonarios y los estímulos ilícitos para que malbaraten la renta petrolera no se dejarán esperar (si durante las elecciones los partidos políticos han recibido favores a cambio de conceder negocios a televisoras y otras empresas ¿por qué no ocurriría igual y peor tratándose de petroleras con una larga cola de sobornos y presiones a países de África y América Latina?). Véase el breve intercambio que tuve en Twitter (imagen anexa) con uno de los ideólogos de la reforma aprobada (citado en tribuna por los senadores que la votaron), el Dr. Carlos Elizondo Mayer Serra. A diferencia de la abundancia de sus opiniones positivas acerca de la apertura radical del sector energético, mi colega del CIDE no suele entrar en detalles cuando se trata de contra argumentos como son el tema de la colusión, ni en el caso de los efectos ambientales perversos del <i>fracking</i>. <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQXv62NGYE799ZZ3K9sGGhHSS5WvjxBwI37uzNg7jGtZv0sahBhK83QZ8z5M4jYzrlcPlcqLEDdFonwTEwW4kEuIsFB-rrLIJxUPYEQN2Cg43bSR3UlFdBft4McuVw0EtziFER1WNT8qhV/s1600/Captura+de+pantalla+2013-12-18+a+la(s)+12.48.00.png" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQXv62NGYE799ZZ3K9sGGhHSS5WvjxBwI37uzNg7jGtZv0sahBhK83QZ8z5M4jYzrlcPlcqLEDdFonwTEwW4kEuIsFB-rrLIJxUPYEQN2Cg43bSR3UlFdBft4McuVw0EtziFER1WNT8qhV/s320/Captura+de+pantalla+2013-12-18+a+la(s)+12.48.00.png" /></a></div> Finalmente, es indignante el hecho de que la alianza del PRI y el PAN sólo fuera sensible a las peticiones de sus aliados del PVEM en el Senado (motivadas por intereses corporativos, no ecológicos). En cambio, dicha alianza eludió el debate parlamentario abierto y enviaron a un ejército de diputados levantadedos a aprobar sin modificar una sola coma del dictamen aprobado por el Senado.
Por todo ello, asistiré a la manifestación este 20 de diciembre del Ángel de la Independencia al Zócalo, a las 4 pm. ¿Y para qué sirve protestar? Para exigir una consulta popular cuya antesala sería la oportunidad de debatir los puntos de alarma mencionados, entre otros temas del nuevo régimen energético, además de la eventual abrogación de la reforma. Recordemos que, hasta ahora, los escasos debates entre columnistas, tuiteros y analistas se enfocaron en temas energéticos muy generales y, más recientemente, en la iniciativa del presidente Peña Nieto; pero la propuesta que emanó de una improvisada negociación entre PAN y PRI nunca fue discutida ampliamente por la sociedad mexicana. Movilizarse en las calles sirve también para presionar al Estado a enmendar lo que ha hecho mal (que es mucho) y comenzar a vigilar desde ya lo que podría convertirse, sin exagerar, en un atraco gigantesco (como ha denunciado el movimiento <i>Morena</i> ligado a López Obrador). Protestar también sirve para exhibir que, mediante efímeros artículos transitorios, la alianza PRI-PAN quiere decidir en <i>petit comité</i> e inconstitucionalmente, el destino de la renta petrolera (fijando de una vez por todas la manera de repartir buena parte de ella). Finalmente, el honor de una sociedad democrática frente a la indolencia y arrogancia de una alianza de políticos exige la intervención popular (a través de manifestaciones, expresión de ideas y exigencia de una consulta popular).
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<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-19059265827031049342013-03-31T13:46:00.001-06:002013-04-01T21:03:52.694-06:00¿Estabilidad emocional o discriminación socioeconómica?<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNfKJFmxU4KOXybi9i8MkG1q_188hs4Tho_B0qI9_tiUjiUF58IFvldlX-oH6MyAJMvNPP07RK3oYfg_W1gveUEM4FfLv3W9IpSYI9EUT2qNPu9LAHS4ri_D9YBy7_4GOemEk_ihPthyVq/s1600/la+foto+(11).jpg" imageanchor="1" ><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhNfKJFmxU4KOXybi9i8MkG1q_188hs4Tho_B0qI9_tiUjiUF58IFvldlX-oH6MyAJMvNPP07RK3oYfg_W1gveUEM4FfLv3W9IpSYI9EUT2qNPu9LAHS4ri_D9YBy7_4GOemEk_ihPthyVq/s512/la+foto+(11).jpg" /></a>
Leo que los diputados federales están planeando reformar el Código Civil Federal para que los jueces consideren la estabilidad emocional de los padres al momento de asignar la guardia y custodia sobre los hijos. Proponen reformar los artículos 416 del Código Civil Federal y el 80 del Código Federal de Procedimientos Civiles, para que el juez, provisto de conocimientos supuestamente objetivos sobre la salud psicológica de los padres, determine a quién le concede la patria potestad. Se trata de regular la decisión para que ésta no se base en criterios subjetivos, ni privilegie mecánicamente a la madre por motivos de género. La clave estaría en las pruebas periciales, es decir, exámenes técnicos y científicos en materia de sicología familiar y de trabajo social.
Sin embargo, el peligro es que los estudios periciales se conviertan en meros pretextos para privilegiar a los cónyuges más poderosos o adinerados. Es más difícil torcer la letra de la ley que la de un <i>test</i> psicológico.
Así, por ejemplo, en el juicio familiar de la cantante Julieta Venegas contra el ciudadano argentino Rodrigo García leo que, a juicio de la perito en materia de trabajo social, éste "a pesar de manifestar la voluntad de querer convivir con la menor, no cuenta con los elementos suficientes para garantizar el adecuado desarrollo de la misma y sobre todo por que distan de la calidad de vida en la que se está desarrollando [la niña], pues no se observó utensilios, ropa, juguetes, calzado, ropa de cama para la menor; esto alteraría la seguridad de la menor y el desarrollo que actualmente tiene". Pero como se ve en las fotografías del departamento de Rodrigo que he subido a esta nota, me parece que la conclusión de la perito constituye una forma velada de discriminación por motivos económicos. La perito dice que la vivienda del padre es "un espacio muy pequeño que destinará a la menor", siendo que el lugar tiene 70 metros cuadrados. ¿Sólo los padres ricos confieren "estabilidad emocional" y calidad de vida a sus hijos?
También el sonado caso de la francesa Maude Versini parece ser otro en el que el poder se reviste de tecnicismos para imponerse sobre la justicia. Los niños salieron de Francia cuando una nana mexicana los sacó sin el consentimiento de la mamá. ¿Es creíble que los niños estén emocionalmente mejor con el ex-gobernador Arturo Montiel que con la madre? En todo caso, la justicia mexicana parece convalidar con peritajes e interpretaciones de los códigos lo que sabemos sin necesidad de éstos: que Julieta Venegas y Arturo Montiel son personas famosas, ricas, influyentes.
La psicología es una disciplina muy cotizada (junto con administración, medicina, contaduría y derecho), por los aspirantes a entrar a la universidad. Y es que ofrece empleos a sus egresados en los hospitales, las escuelas, los reclusorios y los juzgados, entre otras instituciones. Pero si un mal médico se conoce por sus negligencias criminales y un mal abogado por la suerte de sus clientes, el problema es que los psicólogos suelen sobrevivir toda su vida en sus puestos aunque no posean rigor científico, ni honestidad. El filósofo francés Georges Canguilhem decía, usando una metáfora topográfica que entienden quienes han visitado el Barrio Latino en París pero que se puede comprender con una breve explicación, que los psicólogos, al salir de la universidad, tenían dos opciones: podían bajar rápido hacia las oficinas de la policía o hacer el esfuerzo de subir la colina de Santa Genoveva hacia donde están enterrados Marie Curie, Rousseau, Voltaire y Victor Hugo, entre otros: “Cuando se sale de la Sorbona por la calle Saint-Jacques se puede ascender o descender; si se asciende, uno se aproxima al Panteón que es el lugar donde están algunos grandes hombres; pero si se desciende, uno se dirige seguramente a la prefectura de policía”. De la misma manera, los que se gradúan de psicólogos o de licenciados en trabajo social en México pueden convertirse en profesionistas experimentados, incluso en académicos o investigadores, pero también pueden bajar a vivir a los sótanos del sistema o trabajar como empleados -discretos- de los despachos de abogados.
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjb_ymdzkBTpK95vf-adGrRMz-p_puz-ovASvNfyzk3ftmvzstJDCKUAtKhi5YmXGxOVy8LWEfuDB3C9NWiW3iz-ymlLyp0M1DsehsENDiGNt09RA_ajQCEFT_IUeTNWU9sZM2OXUgx-iFl/s1600/la+foto+(10).jpg" imageanchor="1" ><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjb_ymdzkBTpK95vf-adGrRMz-p_puz-ovASvNfyzk3ftmvzstJDCKUAtKhi5YmXGxOVy8LWEfuDB3C9NWiW3iz-ymlLyp0M1DsehsENDiGNt09RA_ajQCEFT_IUeTNWU9sZM2OXUgx-iFl/s512/la+foto+(10).jpg" /></a>
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<br /></div>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-60008323605683840412012-08-15T18:11:00.003-05:002012-08-21T08:57:39.164-05:00Julieta Venegas Percevault vs. Rodrigo García PrietoLos juicios relacionados con la tutela de los hijos involucran los derechos del niño, de la madre y del padre, pero pueden poner en colisión también muchos otros. Es lo que ocurre en la demanda interpuesta por el musicólogo argentino Rodrigo García Prieto contra la cantante mexicana Julieta Venegas. El caso fue turnado a la juez Décimo Primero de lo Familiar, con el número de expediente 658/2012. Esta controversia judicial es interesante porque, además de que se deberá proteger el interés superior de la hija de ambos, se ponderarán derechos familiares de los migrantes extranjeros en México frente a poderes fácticos (en el caso concreto, la industria del espectáculo). Esta última ponderación no forma parte de la argumentación de las partes, pero la asimetría entre ellas nos obliga a prestarle atención.
Julieta Venegas es no sólo una de las cantantes mexicanas más importantes sino una personalidad pública que ha cultivado talentosamente su imagen al respaldar proyectos filantrópicos como el de fomento a la lectura o las actividades de UNICEF. En cambio, Rodrigo García Prieto es un ciudadano argentino sin visibilidad pública en su país natal o en México, lo cual no hace que sus expectativas de justicia deban ser menores. Se trata de un migrante, aunque no un migrante por motivos económicos sino familiares (lo que algunos antropólogos llaman hoy un padre transnacional).
Venegas y García Prieto iniciaron una relación sentimental en agosto de 2009 en Buenos Aires. Procrearon una hija nacida un año más tarde. El 8 de septiembre de 2010, Julieta Venegas registró unilateralmente a la niña. Rodrigo García Prieto pide que se reconozca su paternidad, la guarda y custodia compartida de la menor y la calendarización de viajes de ésta. Desde su perspectiva, su hija tiene derecho de vivir y crecer en el seno de una familia, conocer a sus progenitores y a mantener relaciones personales y contacto directo con ellos, aun en el caso de estar separados.
Sería importante que la autoridad judicial se coloque en los reflectores no de la prensa <i>People</i> y de los medios electrónicos, con el morbo que los impulsa, sino de las organizaciones de derechos humanos dado que están en juego el derecho de una madre a continuar una carrera profesional ambiciosa, el de un hombre a reivindicar la paternidad como derecho, la igualdad de acceso a la justicia (independientemente de que el solicitante sea mexicano o extranjero, célebre o desconocido, hombre o mujer), entre otros. Desde luego, los primeros derechos a tomar en cuenta son los de la menor.
Un lector de la versión original de esta nota me ha hecho notar que es un mero recuento de los hechos sin tomar partido ("digno de una revista <i>People</i>"). Tiene razón y prefiero que sea así, aunque rompa con el tono de mi blog (si es que tiene algún tono coherente). Lo prefiero porque el tipo de filósofo que era el rey Salomón no tiene nada qué ver conmigo. No me gustaría ser un juez de asuntos familiares. Hay involucrada en esos asuntos gente normal y los tribunales no deberían estar hechos para la gente normal sino para personas límite que "violan el contrato social" o que son intratables. Según Elster, por los largos juicios de divorcio suelen sufrir más los niños que por las decisiones rápidas acerca de su guarda y custodia. Entonces ¿por qué entré al tema? Porque me parece importante que el juicio que se llevará a cabo sea equilibrado y, para ello, vale la pena que sea observado.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-31753742575990953692012-05-22T21:08:00.001-05:002012-05-22T22:28:26.245-05:00¿Por qué voy a votar por AMLO aun si no estoy de acuerdo con algunas de sus propuestas?No creo que el Estado Mexicano deba construir 5 refinerías porque corre el riesgo de hacerlo mal y con un alto costo, cuando existen compañías privadas que tienen la experiencia y las patentes para hacerlo de manera barata. No creo que el Estado Mexicano deba construir un tren bala porque, a diferencia de Europa, es el transporte aéreo el que resulta más adecuado dada la extensión de nuestro territorio y lo accidentado de su suelo. Andrés Manuel López Obrador ha dicho que le gustaría promover un Estado de Bienestar como el europeo en México. No está claro si ello significa un estado que administre empresas industriales públicas, un estado que redistribuya la riqueza mediante impuestos progresivos, un estado que garantice tarifas universales subsidiadas o un estado que mediante gobiernos de coalición aplique programas consensados entre trabajadores, empleadores y partidos políticos. La socialdemocracia escandinava no buscó tener la propiedad pública de los medios de producción, el primer laborismo británico sí. El "Estado Providencia" francés no estuvo fundado en gobiernos de coalición como sí el Estado Social austriaco. No existe un modelo único de Estado de Bienestar Europeo y no sabemos exactamente qué quiere decir López Obrador cuando propone inspirarse de ellos. Sabemos, en cambio, que existe una crisis financiera en Europa por el costo de ese modelo. En Alemania descubrieron rápidamente que las altas jubilaciones correspondientes al último salario del trabajador (no proporcionales a los años de cotización) eran incosteables, en Francia se percataron que algunas empresas públicas eran ineficientes y no estratégicas, en España se dan cuenta que la seguridad social no debería pagar cirugías estéticas, en Grecia se han encontrado recientemente fraudes escandalosos al sistema de seguridad social (como taxistas en activo que reciben pensiones por "ceguera", falsa desde luego y falsa para el burócrata que la autorizó). ¿Qué debemos y podemos copiar del Estado Benefactor Europeo? El profesor del ITAM Rodolfo Vázquez en su reciente libro <i>Consenso socialdemócrata y constitucionalismo</i> (Fontamara, México, 2012) explica que un estado decente es aquel que, al menos, no humilla a las personas. Hay estados cavernarios que admiten la crueldad contra sus súbditos, estados que no toleran la crueldad pero sí las humillaciones, estados que no toleran humillaciones pero son injustos en la repartición de bienes y derechos. En este continuo que va de los peores estados a los mejores, podríamos poner en duda la viabilidad de algunos modelos de justicia distributiva por su imposible financiación o incorrecto sistema de incentivos. Se dice que la socialdemocracia escandinava, por ejemplo, vio afectada su eficacia económica por la radical nivelación de los ingresos entre sus habitantes. Pero si cierto grado de desigualdad puede ser necesario y legítimo como incentivo de la producción (John Rawls lo reconoció en 1971 en su gran <i>Teoría de la justicia</i>), existen crueldades sociales e indecencias que no debieron ni deben tener lugar ni antes, ni durante, ni después de la era del Estado Benefactor. La explotación cínica a los trabajadores subcontratados en Santa Fe, Ciudad de México, que deben comprar su propio uniforme y someterse a humillaciones cotidianas por parte de capataces pagados para evadir prestaciones laborales y otorgar servicios "impecables"; la proliferación de niños mendigos en las ciudades mexicanas; la narco-guerra que liquida sin más trámite a decenas de miles de personas; la corrupción abierta de líderes sindicales corporativos heredados del viejo régimen posrevolucionario, etcétera, etcétera... son fenómenos de indecencia intolerable.
¿Quién puede corregir esas muestras de crueldad e indecencia en México? No veo combatiéndolas al candidato del PRI, con sus gastos personales ostentosos, sus aliados cercanos y su trayectoria dentro del Grupo Atlacomulco. ¿No temo a las inexactitudes y defectos técnicos de las propuestas de López Obrador? ¿No confunde él una política estatista obsoleta con una de redistribución justa? ¿Mis diferencias con él no son lo suficientemente graves? No, no lo son, porque sé que como presidente estaría rodeado de colaboradores que le mostrarían la viabilidad de unas y otras propuestas. Hoy no se requiere de mucho para saber por qué fracasaron algunos estados europeos de bienestar. En cambio, la trayectoria del candidato de la izquierda dice mucho de lo que sí está dispuesto a hacer. A combatir la crueldad y la indecencia institucionales. Si además llega la justicia, qué mejor.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-71655628928095907752011-12-21T12:49:00.005-06:002011-12-21T21:40:48.395-06:00Del Estado laico al subsidio a la venida del Papa“En vez de epítetos, muéstrenos en qué parte del texto de la reforma al artículo 24 constitucional se vulnera el Estado laico”. Esto piden los defensores de la reciente reforma en materia de libertad religiosa. La petición es sensata, pero quienes sospechan que la reforma vulnera el Estado Laico y no tienen formación en derecho constitucional se han visto en problemas para articular sus sospechas. Intelectuales como Jorge Alcocer o Lorenzo Meyer se preguntan qué sentido tendría para los promotores del PRI y del PAN seguir adelante con la reforma, si en la versión finalmente negociada supuestamente no se modifica nada del fondo del artículo 24. <br />Para responder a la pregunta de si el texto vulnera el Estado laico, es preciso leer la reforma de la manera en que lo haría la Suprema Corte. Los tribunales constitucionales identifican derechos fundamentales y luego se cercioran de que estén garantizados. Y, en este caso, los derechos fundamentales anteriores a la reforma son distintos de los que surgirían de aprobarse ésta. Hoy aparecen en el artículo 24 los dos siguientes: libertad de creencia religiosa y libertad de culto. Esta última libertad está interpretada en la propia Constitución: “Los actos religiosos de culto público se celebrarán ordinariamente en los templos. Los que extraordinariamente se celebren fuera de éstos se sujetarán a la ley reglamentaria.” Por lo tanto, la libertad de culto es hoy en nuestro país un derecho fundamental que sólo se restringe en el caso de que se ejerza fuera de los templos.<br />Por su parte, la redacción propuesta del artículo 24 enuncia en el primer párrafo las libertades de convicción ética, conciencia, de religión y la libertad de culto tanto en público como en privado, en lo individual y en lo colectivo. En el fondo, dentro de lo barroco de la lista anterior, lo trascendente es que se elevó a rango de derecho fundamental la libertad de culto en público, ya sea individual o colectivamente.<br />¿Qué implicaciones tiene que la libertad de culto en público pase a ser un derecho fundamental? El concepto mismo de derechos fundamentales supone que existen también derechos no fundamentales. Podemos discutir, por dar un ejemplo, si el derecho a tomar vacaciones debe ser un derecho fundamental, en cuyo caso correspondería a los trabajadores, a los desempleados y a los niños. A primera vista, ese derecho no parece tan esencial como otros, porque no está justificado en una necesidad básica tan elemental como alimentarse o habitar bajo un techo. Pero como se supone que vivimos en estados democráticos de derecho, si la sociedad decide que el derecho a tomar vacaciones es fundamental y lo consagra en la Constitución, los poderes legislativo y ejecutivo deben implementar políticas para garantizarlo (por ejemplo, campamentos de vacaciones gratuitos para niños pobres). Si son omisos, la Suprema Corte deberá garantizar el derecho a las vacaciones y ordenar a tales poderes lo que proceda.<br />Si se aprueba la reforma al artículo 24, el Estado deberá tomar medidas para garantizar la libertad de culto en público, en forma individual o colectiva. Esto puede significar, en el peor de los casos, el subsidio a eventos como la venida del Papa. En el mejor de los casos, los abusivos sacerdotes que ya suelen colocar altavoces afuera de sus iglesias para compartirnos su sermón se verán protegidos. <br />Los ingenuos defensores de la laicidad que también apoyan la reforma al artículo 24 pretenden tranquilizarnos diciendo que el tercer párrafo seguirá señalando que “los actos religiosos de culto público se celebrarán ordinariamente en los templos” y que “los que extraordinariamente se celebren fuera de éstos se sujetarán a la ley reglamentaria”. Pero olvidan que una ley reglamentaria sirve para garantizar los derechos fundamentales, no para restringirlos. Lo que ordena la Constitución no puede ser atenuado por una ley inferior. Por lo tanto, no habrá otras restricciones a la libertad de culto en público que las que deriven de otros derechos fundamentales.<br />¿Cómo es posible que todo lo anterior no se haya visto y discutido en la Cámara de Diputados? ¿Estamos enunciando una mera teoría del complot? La modificación del artículo 24 constitucional es un ejemplo de constitucionalismo encubierto. Recordemos que para modificar el significado de la oración “Toda la educación que el Estado imparta será gratuita” del artículo 3º, Carlos Salinas promovió, con engaños, otra frase en la Constitución: que el Estado impartiría educación básica y “promovería” el resto. Muchos legisladores no lo notaron pero, años más tarde, los abogados podían aducir que “en estricto sentido, el Estado no imparte la educación superior, sólo la promueve y, por lo tanto, no es gratuita”.<br /><br /><em>El autor es abogado y doctor en filosofía. Investigador SNI I.</em>Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-44550276471282016212011-12-05T10:02:00.006-06:002011-12-05T13:12:20.296-06:00De las neuro-ciencias a la neuro-charlatanería<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSAHkRzySzeMhHGAALicIMtJg20_Zb158jUNlwfIevq4y6cAZldT9fvOSPQr2pdPeO3y4tAWxhKa8Hy2toHsjHbFAxGpP5zXXYsmGIP7TBeUKQJQ-q6BMcw6ZPms54ZJmScRADpkcjmdZQ/s1600/Neural.jpg"><img style="float:left; margin:0 10px 10px 0;cursor:pointer; cursor:hand;width: 200px; height: 162px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSAHkRzySzeMhHGAALicIMtJg20_Zb158jUNlwfIevq4y6cAZldT9fvOSPQr2pdPeO3y4tAWxhKa8Hy2toHsjHbFAxGpP5zXXYsmGIP7TBeUKQJQ-q6BMcw6ZPms54ZJmScRADpkcjmdZQ/s200/Neural.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5682676165632611602" /></a><br />Nuevas disciplinas científicas proliferan: la neuro-estética, la neuro-economía, la neuro-antropología, el neuro-derecho, la neuro-literatura, etcétera. Se trata de buscar las bases neurobiológicas de la estética, la economía, la antropología y demás. Gracias a la tecnología llamada “imaginería por resonancia magnética funcional”, algunos científicos prevén establecer el correlato cerebral del disfrute artístico de un cuadro, de las decisiones económicas de un inversionista, del Yo de una persona oriental a diferencia de una occidental. Dado lo riguroso que parece el proyecto (¡al fin darle sustento a las ciencias sociales y humanas!), las universidades se apresuran a apoyar esas líneas de investigación que les dan prestigio y abren un horizonte insospechado de descubrimientos.<br />Asisto a un congreso de filosofía del derecho y escucho a uno de mis viejos colegas, el Dr. Enrique Cáceres, hablando de cuestiones cerebrales relacionadas con las decisiones de los jueces y del llamado “efecto lucifer” según el cual algunas fuerzas situacionales transforman a un estudiante universitario en un sádico guardián de prisión. Compro el último libro del escritor Jorge Volpi y se trata de un ensayo de neuro-literatura donde leo que “la conciencia es una suerte de parásito que, una vez alojado en nuestra mente, se apodera también de nuestro cuerpo”. El grupo de epistemología de mi universidad organiza una conferencia sobre filosofía de la mente a cargo del Profesor Adrian Cussins y mezclado entre el público escucho decir que “la conciencia es una entidad dudosa y mal definida”. Leo un artículo de neuro-estética y los autores me explican que el aprecio del arte está relacionado con las “neuronas espejo” que nos hacen proyectarnos en la sonrisa de la Gioconda o en los gestos de dolor en el Guernica. Escucho la discusión en un seminario de neuro-economía donde los participantes afirman que si el comportamiento de los agentes no coincide con los modelos ideales de la teoría de la decisión racional, entonces debemos desechar esta última.<br />No dudaría en rendirme a la evidencia, por sorpresiva que ésta fuese, si la demostración científica de los neuro-científicos fuese contundente. Soy darwiniano y einsteiniano aunque Darwin y Einstein hayan asesinado antiguas certezas sobre el hombre y el tiempo. Si hubiera muerto la noción de conciencia, yo estaría en el velorio. Pero muchas de las neo-neuro-ciencias-humanas carecen de contundencia. Ubicar el correlato neuronal de cierta percepción artística no sirve para interpretar “Las Meninas”, a diferencia del famoso prefacio de Foucault a <em>Las palabras y las cosas</em> desde la filosofía y la historia. Identificar algunas situaciones que fuerzan a los individuos a la maldad o fijar los límites de la cognición económica (<em>quaestio facti</em>), no es suficiente para tirar a la basura teorías normativas (<em>quaestio iuris</em>).<br />Desde luego que los estudios en ciencias cognitivas tienen valor. Incluso, ciertos resultados experimentales negativos, como el no localizar ciertos “módulos” responsables de alguna conducta, no son necesariamente fracasos pues permiten postular hipótesis alternativas (como la realizabilidad múltiple por varias zonas del cerebro de dichas conductas). Por lo tanto, no considero un desperdicio el financiamiento a los buenos proyectos en neuro-ciencias. O bien, en el caso de Volpi, las ciencias cognitivas le han servido para defender el papel edificante que tiene la literatura para nuestra mente (su argumento de que la literatura nos enseña a ser humanos me parece fundamental). Enrique Peña Nieto podría comenzar su vida de lector con <em>Leer la mente</em>, del citado escritor.<br />Pero el territorio de la conciencia no es un coto vedado de los neuro-científicos y menos aún de sus intérpretes más superficiales. El multifacético problema de la autoconciencia, de la subjetividad, del Yo y de la identidad individual ha sido un tema central en las ciencias sociales y las humanidades: en la filosofía, de Platón a Foucault, pasando por Hume y Hegel, en la sociología y la antropología lo mismo que en la psicología en sus distintas vertientes. Aunque vista desde la biología la autoconciencia humana se pueda entender solamente como resultado de adaptaciones evolutivas, las perspectivas ofrecidas por aquellas disciplinas son de una contemporaneidad fundamental. De la <em>psykhé</em> social de los antiguos griegos, que ha sido descrita por destacados especialistas de filosofía antigua, al yo confuciano y amerindio que la filosofía mundial comienza apenas a develar, el libro que edité con Miriam Madureira, titulado <em>Autoconocimiento y reflexividad. Perspectivas contemporáneas</em> (Juan Pablos, 2011) se aleja del reduccionismo empirista tan en boga entre muchos seguidores de las llamadas ciencias cognitivas. La presentación se llevará a cabo el jueves 8 de diciembre de 2011 a las 17:00 hrs. en la Casa Rafael Galván, en Zacatecas 94, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, frente a la plaza Luis Cabrera, México, D.F. Los presentadores serán el Dr. Luis Xavier López Farjeat (UP), el Dr. José Ezcurdia (UNAM) y el Dr. Rodrigo Díaz (UAM-Iztapalapa). Al final, se ofrecerá una copa de vino y bocadillos a los asistentes.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-7362635292008259602011-10-18T16:30:00.004-05:002011-10-18T16:41:28.746-05:00Carta a mi colega Edur Velasco, en huelga de hambre<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBnSFErVdiQ1nqfzbr-IJigc3wmY8NiSwOzfxrf2jKz565ivoMorxC5B_GwUvaTq7kF9-OB_wdNa313PzQ8G8SRlJyy1peoxqI8iP-5PRqUq6EgpCQzldIvFeYuSekLhK2-vMH3ThY7Aga/s1600/Huelga+de+Hambre.jpg"><img style="float:left; margin:0 10px 10px 0;cursor:pointer; cursor:hand;width: 133px; height: 200px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBnSFErVdiQ1nqfzbr-IJigc3wmY8NiSwOzfxrf2jKz565ivoMorxC5B_GwUvaTq7kF9-OB_wdNa313PzQ8G8SRlJyy1peoxqI8iP-5PRqUq6EgpCQzldIvFeYuSekLhK2-vMH3ThY7Aga/s200/Huelga+de+Hambre.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5664948645648054018" /></a><br />Estimado Edur:<br />Me dirijo a ti porque somos colegas de la UAM, aunque yo no forme parte de tu generación, la de los jóvenes fundadores que revindicaban los valores de la izquierda revolucionaria en los años setenta, sino de otra, los profesores de las Unidades Cuajimalpa y Lerma fundadas en 2005 y 2009. La mayoría de nosotros somos “progresistas” en un sentido que tu considerarás muy restringido (creemos en la lucha cultural contra el racismo, la discriminación sexual y la explotación capitalista, pero casi no estamos sindicalizados y nuestra lucha política no es mucho más activa que la del promedio de los ciudadanos). A varios nuevos profesores de la UAM nos une una cierta moral meritocrática que exige que las plazas sean asignadas a doctores con vocación de investigadores y de manera transparente. Creemos que eso redunda en beneficio de la sociedad y de los estudiantes.<br />A pesar de la distancia que separa a nuestras generaciones, Edur, recuerdo un breve momento en que coincidimos: una tarde de 1995 viniste a visitar en la explanada de la rectoría de la UNAM la huelga de hambre de varios jóvenes que luchaban por el derecho a la educación y a quienes yo apoyaba como pasante de derecho. En esa época, había indignación no sólo por el gran número de aspirantes excluidos sino porque se habían vendido ilegalmente exámenes de admisión a la UNAM (lo que logramos probar ante la Procuraduría General de la República y desembocó en la creación del CENEVAL). Ese instante, en el que nos conocimos y coincidimos, es suficiente para que hoy que me entero de la huelga de hambre que has iniciado hace varios días, me parezca insoportable no reaccionar de alguna forma.<br />Aprendí lo duro que es una huelga de hambre viendo las secuelas físicas causadas en mis amigos y representados del movimiento de 1995. Poner en juego la propia vida como forma de acción pacífica puede parecerle trivial a quienes nunca lo han hecho o a los que han aceptado que la existencia humana sea la moneda de cambio del sistema económico y político.<br />Tu dices que prefieres morirte en la lucha, antes que bajo las enfermedades crónicas que solemos contraer en el oficio de profesor de universidad bajo la presión de los sistemas de control neoliberales. Tus exigencias son tres: obtener que se destine el 2% del PIB mexicano a la educación superior, el aumento del Salario Mínimo y la atención a las demandas del Sindicato Mexicano de Electricistas<br />Te ofrezco informar de tu combate a mis colegas y alumnos. Estaré también en las manifestaciones que sean convocadas para apoyar la justicia distributiva en nombre de la cual tú estás arriesgando tanto.<br />Te mando un abrazo solidario,<br /><br />Bernardo Bolaños<br />Profesor del Departamento de Humanidades<br />UAM-CuajimalpaBernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-45070555097253002762011-06-27T20:03:00.012-05:002011-07-20T18:46:45.991-05:00Historia de la mente: Agustín de Hipona<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu6hnNTQzzgxkG9JlUfCz68H7apDaFiD7eYg6vpWLR42EbJ8FuLaRj0ZapqBHWnWWyzjk0iCz_mQ3vcdPgZD8WBdw3tSjb96_1eRxzLNZpM9hF1uTRp3YWuxkxw0peH59Nba3lOOUFCK8E/s1600/12th-centurySt_Augustine%2527s_Sermons.jpg"><img style="float:left; margin:0 10px 10px 0;cursor:pointer; cursor:hand;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu6hnNTQzzgxkG9JlUfCz68H7apDaFiD7eYg6vpWLR42EbJ8FuLaRj0ZapqBHWnWWyzjk0iCz_mQ3vcdPgZD8WBdw3tSjb96_1eRxzLNZpM9hF1uTRp3YWuxkxw0peH59Nba3lOOUFCK8E/s800/12th-centurySt_Augustine%2527s_Sermons.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5623070195917224194" /></a><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><strong>F</strong>ue necesaria la influencia cultural norafricana para quebrar la hegemonía del <em>ethos </em>griego en el mundo occidental. Del ideal griego de hombre magnánimo (altivo, valiente, discutidor, celoso de su honor) al de siervo de Dios (humilde, introspectivo, supuestamente amoroso y caritativo). De las virtudes cardinales para Platón (fuerza, templanza, sabiduría, justicia), a las virtudes teologales (fe, esperanza y caridad). No es un azar que la vida monástica sea un invento copto, es decir, egipcio. Se dice que cuando la iglesia católica eligió en el concilio de Cartago de 417 como doctrina oficial la filosofía del obispo Agustín de la ciudad de Hipona (hoy Annaba, Argelia), comenzó la edad media. Ese corte no me parece mera historia hagiográfica. Los conceptos que Agustín ayudó a moldear (creación, santidad, fe, gracia, persona/prójimo, amor cristiano, la verdad como Dios) fueron la base del pensamiento medieval hegemónico durante quinientos años. No fue, entonces, con la penetración de la cultura arábiga a partir del siglo XI que el occidente se vio transformado por la cultura oriental, sino varios siglos antes. <br />Vernant afirma que con el surgimiento del hombre santo, el asceta, el anacoreta, el hombre de Dios, también emerge un tipo de individuo. “Una nueva forma de identidad toma cuerpo en ese momento: ella define el individuo humano por sus pensamiento más íntimos, sus imaginaciones secretas, sus sueños nocturnos, sus pulsiones llenas de pecado, la presencia constante, obsesiva, en su fuero interno, de todas las formas de tentación”. Pierre Hadot elige el siglo IV para fijar el surgimiento de la autoconsciencia: “En vez de decir: el alma, Agustín afirma: soy, me conozco, me amo, esos tres actos implicándose mutuamente […] Fueron necesarios cuatro siglos para que el cristianismo alcanzara esta consciencia del yo”.<br />No es seguro que Agustín haya “anticipado” el <em>cogito </em>cartesiano. Cuando un contemporáneo de Descartes, el padre Mersenne, afirmó que lo había hecho, Pascal salió en defensa del primero: “Quiero preguntar a personas imparciales –escribe Pascal- si el siguiente principio: ‘La materia se encuentra en la imposibilidad natural e insuperable de pensar’, y este otro: ‘Pienso, por lo tanto existo’, son en efecto una misma cosa en la mente de Descartes y en la de San Agustín, quien decía lo mismo hace mil doscientos años”. Enseguida, se responde: “En verdad, estoy lejos de decir que Descartes no sea el verdadero autor, incluso si él tomó [tales principios] de la lectura de aquel gran santo; pues conozco la diferencia que hay entre escribir una palabra aventuradamente, sin hacer una reflexión más larga y profunda, y encontrar en esa palabra una serie admirable de consecuencias, probar la distinción entre la naturaleza material y espiritual, hacer de ello un principio firme y sostenido de la física entera, como lo intentó hacer Descartes. Y, sin examinar si ha tenido éxito en su tentativa, asumo hipotéticamente que lo ha tenido y es como parte de esta suposición que afirmo que esa palabra [<em>cogito</em>] es distinta en sus escritos de la misma cuando es mencionada de manera pasajera en otros, tanto como es distinto un hombre muerto en comparación con uno lleno de vida y de fuerza” (AP 358).<br />La fuerza de estas palabras es tanto más significativa si pensamos que Pascal era cercano al jansenismo, doctrina católica inspirada en San Agustín y desarrollada por Cornelio Jansen, obispo de origen holandés enfrentado a los jesuitas. En todo caso, es seguro que Agustín afirma, siguiendo a Plotino, que la mente no forma parte del cuerpo y que el darnos cuenta que pensamos no es resultado de una sensación (como, vimos, piensa Aristóteles): “si [el alma] fuera en verdad alguna de estas cosas [fuego, aire, cuerpo] pensaría en ella muy de otra manera que en las demás. Es decir, no pensaría en ellas mediante las ficciones de la fantasía, como se piensa en las cosas ausentes que han estado en contacto con los sentidos, bien se trate de ellas mismas, bien de otras muy semejantes, sino por medio de una presencia íntima y real, no imaginaria (nada hay a la mente más presente que ella misma) […] Si logra despojarse de todos estos fantasmas y no cree que ella sea alguna de estas cosas, lo que de ella misma quede, esto sólo es ella.” En resumen, podemos decir que la autoconsciencia es, en cierto sentido, una invención del cristianismo.Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7204403374906967146.post-12935212983729249222011-06-21T13:01:00.014-05:002012-02-27T08:14:10.551-06:00Aristóteles: autoconocimiento pero no autoconsciencia<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTicE2CyVE8CUxuSwHcCD8ytJKiGIylnT6n2vjQQhvVfM7_jfVJZRnB1ElMqFO1_3bzoJ1l37k9k9AF6iV4KtukfUNWYCv_dUAmk9q5LlpcbSarmFKkJiRQoqmyTDTBkRBtW6fNCBCHd5O/s1600/megalopsychia.jpg"><img style="float:left; margin:0 10px 10px 0;cursor:pointer; cursor:hand;width: 200px; height: 133px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhTicE2CyVE8CUxuSwHcCD8ytJKiGIylnT6n2vjQQhvVfM7_jfVJZRnB1ElMqFO1_3bzoJ1l37k9k9AF6iV4KtukfUNWYCv_dUAmk9q5LlpcbSarmFKkJiRQoqmyTDTBkRBtW6fNCBCHd5O/s200/megalopsychia.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5620805993772012130" /></a><br />Aristóteles describe claramente la existencia de la autoconsciencia… pero en Dios. La esencia misma de Dios consiste en ser “entendimiento que se capta a sí mismo captando lo inteligible”, “pensamiento del pensamiento”. No se trata, desde luego, del dios de Abraham, de Isaac, de Jesucristo, de Pascal, sino del dios de los filósofos y de los sabios. El dios de Aristóteles es semejante a lo que será siglos más tarde el dios de Descartes, en tanto ambos resultan de sendas teorías metafísicas. En el caso de Aristóteles, Dios es la entidad primera que mueve sin estar ella misma en movimiento. Es el primer motor. Pero lo asombroso de Dios es que pueda pensar sin ser cuerpo, pensar siendo mente ¿Hoy nos sorprende que una mente piense? Derbey cree que Aristóteles contrapone el <em>noûs</em> divino al <em>noûs</em> o inteligencia humana: mientras que el pensamiento divino es su propio objeto y se piensa directamente a él mismo, por el contrario, para el estagirita, el conocimiento del hombre lo es siempre de otro (<em>aeì állou</em>) y de sí mismo solamente de manera indirecta (<em>hautēs en parérgōi</em>).<br />Que, para Aristóteles, la mente humana sea incapaz de poseer la autoconsciencia es reafirmado por otros intérpretes. Brunschvig observa en los griegos “una especie de <em>cogito</em> paradójico que podría formularse de la siguiente manera: me veo (en mi obra o en cualquier otra de las proyecciones de mí mismo [como son mi amigo, mi deudor, mi hijo, mi reflejo, mi sombra]), por lo tanto soy; y soy allí donde me veo; <em>soy</em> esta proyección de mí que veo”.<br />Pero el asunto es complejo. En la <em>Ética a Nicómaco</em>, Aristóteles menciona claramente que cuando sentimos que pensamos es precisamente cuando sentimos que somos. Siento que pienso, por lo tanto, siento que soy. Haciendo un juicio rápido, esto se parece al <em>cogito ergo sum</em> cartesiano. Eh aquí el párrafo según la traducción de Araujo y Marías: “si el que ve se da cuenta que ve, y el que oye de que oye, y el que anda de que anda, y en todas las otras actividades hay igualmente <em>algo que percibe </em>que estamos actuando y se da cuenta, cuando sentimos, de que estamos sintiendo, y cuando pensamos, de que estamos pensando, y percibir que sentimos o pensamos es percibir que somos” (las cursivas son nuestras, para enfatizar que Aristóteles se refiere a la percepción del propio pensamiento). Jean-Pierre Vernant interpreta precisamente dicho fragmento como una prueba de que Aristóteles se refiere a la autopercepción del propio pensar, distinta de la autoconsciencia : “Existo –interpreta Vernant- porque tengo manos, pies, sentimientos, camino, corro, veo y siento. Hago todo eso y <em>sé que lo hago</em>” (las cursivas son nuestras, para enfatizar que Vernant compara la consciencia o saber acerca de las acciones de nuestro cuerpo con la percepción de nuestro pensamiento que menciona Aristóteles). Pero ¿Por qué compara Vernant el “pensar que sentimos” con el “sentir que pensamos”, invirtiendo los operadores doxásticos? Por el contrario, lo que Aristóteles compara es el “percibir que pensamos” con el “percibir que sentimos”.<br />La lógica epistémica nos ayuda a formalizar fácilmente el orden de las distintas actitudes proposicionales que están en juego, gracias a operadores doxásticos correspondientes a la sensación y al pensamiento.<br />Aristóteles dice que [Sentimos o percibimos que (Pensamos que p)] = S P p<br />Vernant dice que Aristóteles dice que [Pensamos que (Sentimos que p)] = P S p<br />La autoconsciencia, en todo caso, consistiría en [Pensar que (Pensamos que p)] = P P p<br />Así, si bien Aristóteles no aludiría en estricto sentido a la autoconsciencia, sí se referiría a la experiencia sensible del funcionamiento de la propia consciencia.<br />Pero si observamos que el fragmento citado por Vernant proviene de la mente de un filósofo en acción, el Aristóteles histórico, entonces podemos formalizar también esa presencia añadiendo un operador doxástico, el de la de la mente del autor de la reflexión filosófica. Tenemos que [Aristóteles piensa que [Sentimos que [Pensamos que p]]] = P S P p<br />Como PSPp no significa lo mismo que PPp, debemos concluir junto con los autores citados más arriba que Aristóteles no alude en estricto sentido a la autoconsciencia, ni siquiera en el fragmento mencionado. Alcanzar la autoconsciencia depende ya solamente de la eliminación de ese mediador que es la sensación (S), mediador entre el pensamiento reflexivo del filósofo (P) y la representación de la actividad de su propia mente (Pp).<br />Kahn observa en Aristóteles “una ausencia total del sentido cartesiano de la radical y necesaria incompatibilidad entre pensamiento o consciencia, por un lado, y extensión física, por el otro”. Es decir que Aristóteles no habría reconocido la separación entre mente y cuerpo, sustancia inextensa y sustancia extensa, y quizá debamos elogiarlo por ello, dado lo problemático que nos resulta hoy explicar la autonomía relativa de la primera con respecto al segundo. Quizá debamos rescatar la poderosa intuición de los antiguos, el pensamiento no se piensa si no existe siempre algo intermedio que lo sienta, es decir, el cuerpo, cerebro y sistema nervioso.<br />Pero para someter a prueba una conclusión tan fuerte (la de que en Aristóteles la mente es cuerpo y está mediada necesariamente por las sensaciones), vale la pena observar lo que dice en otros textos con respecto a nociones similares a la de autoconsciencia, en particular, la de autoconocimiento. En el libro IV de la <em>Ética a Nicómaco</em>, trata de la virtud llamada <em>megalopsykhia</em> o magnanimidad. Ésta es la grandeza del alma (<em>psykhe</em>) y requiere, además, del conocerse a uno mismo. La grandeza del alma significa grandeza con respecto a cada una de las diferentes virtudes (valentía, templanza, generosidad, franqueza, etcétera), de modo que la persona magnánima tiene que ser virtuosa en general. La magnanimidad es el justo medio entre el vicio de la infamia en el que se colocan por sí mismos los hombres tímidos, y el vicio de quien aspira a honores inmerecidos. En resumen, el <em>megalopsykhos</em> es una persona que se encuentra a medio camino entre el pusilánime y el pretencioso (con aires de superioridad sin fundamento) que no se conocen a sí mismos.<br />La diferencia entre la autoconsciencia y el autoconocimiento en Aristóteles radicaría en que la primera es concebida como conocimiento meramente contemplativo y autoreferente (reflexivo) de la mente, mientras que el segundo es una <em>phronesis</em>, un conocimiento práctico del sujeto acerca de sí mismo (no acerca de su mente). A pesar de que el libro IV de la <em>Ética a Nicómaco </em>no atribuye directamente la <em>phronesis</em> al <em>megalopsykhos</em>, una interpretación sistemática nos permite hacer esta relación. Por un lado, Aristóteles distingue al hombre magnánimo (libro IV) del filósofo contemplativo (libro X). En los <em>Analíticos posteriores</em>, incluye entre la lista de <em>megalopsykhos</em> célebres a Sócrates, el filósofo comprometido, junto con soldados que tuvieron un gran sentido de compromiso colectivo (Aquiles, Ajax, Alcibíades, Lisandro). Por lo tanto, el "hombre de alma grande" es, para Aristóteles, alguien virtuoso y con un fuerte sentido comunitario. <br />En conclusión, la autoconsciencia sería, para Aristóteles, una práctica exclusiva de Dios. En cambio, el autoconocimiento dependería de la virtud humana suprema, la magnanimidad. Aunque la descripción del <em>megalopsykhos</em> coincide para nosotros, modernos, con la de un individuo altivo y displicente, que desprecia a la mayoría de los demás, que no busca honores, ni cree depender de la buena suerte, para Aristóteles se trata, literalmente, del tipo de "hombre perfecto" (definición flexible de la perfección humana pues comprende tanto al iracundo Aquiles como al dubitativo Sócrates).Bernardo Bolañoshttp://www.blogger.com/profile/12786831821029395133noreply@blogger.com0